¿Cómo debe ser un tratamiento detox?
En un tratamiento detox la prioridad es la eliminación de toxinas, no se trata de perder peso de manera drástica, siguiendo alguna dieta restrictiva. No se busca una restricción de calorías, ya que un menor aporte induce a un mayor estrés oxidativo, eleva los niveles de cortisol y aumenta el apetito. Lo que se pretende es sostener en el tiempo una dieta equilibrada, a fin de desintoxicar el hígado y eliminar las toxinas contaminantes acumuladas.
El hígado, la glándula más grande del cuerpo, lleva a cabo numerosas funciones bioquímicas y metabólicas, como expulsar del cuerpo las sustancias nocivas, cuya acumulación puede ocasionar problemas. Es también responsable de expulsar los metabolitos de los fármacos y otras toxinas. Todo esto sin contar con que es el primer órgano a donde llega la mayoría de nutrientes, antes de que sean absorbidos por las paredes intestinales.
La acumulación de toxinas procedentes del alcohol, los medicamentos o el tabaco también afecta a nuestro intestino, hasta el punto de impedir que los sistemas linfáticos y excretores los eliminen. De esta manera se pueden inflamar las mucosas de los sistemas respiratorio, digestivo y urogenital, lo que implica al funcionamiento del sistema inmune, ya que sus primeras líneas de defensa están afectadas. Sin contar con las complicaciones que esto supone para el hígado. Evita problemas futuros haciendo una buena limpieza de tu sistema digestivo, antes de que las toxinas acumuladas sean un problema.